DOS LEYENDAS ANTIGUAS DIFERENTES (MICRORRELATO)
El hombre provenía de una familia muy antigua. Esta familia se pasaba de una generación a la otra una leyenda que rezaba así: “Aquel miembro de nuestra familia que abra los ojos cuando bese a una mujer, esta mujer lo abandonará”.
El hombre cuya familia conservaba esta leyenda muy antigua se cansó de la mujer con la que llevaba varios años unido y consideró que gracias a aquella leyenda antigua se desharía de ella muy fácilmente. Así que, en contra de lo que había hecho siempre, esta vez no cerró los ojos al besarla, sino que los mantuvo muy abiertos.
No le funcionó su leyenda y permaneció junto a aquella mujer hasta el final de sus días, porque en la familia de aquella mujer había una leyenda muy antigua y más poderosa que la suya que aseguraba: «Nunca podrá abandonarte un hombre que te bese con los ojos abiertos”.
Tengamos cuidado con las leyendas. Recodemos la de tropezar más de una vez con la misma piedra.