2.1 La noticia de la partida
Alrededor de las once de la mañana, dos días después de cerrar el acuerdo de trabajar en Cuba con el tal Amadeo, Eliette entró en mi habitación. Madame Camille le había proporcionado una llave de mi cuarto para mayor comodidad de ambos, pues yo solía dormir hasta el mediodía. Con