UNA GOTA DE HUMOR (808) MICRORRELATO
Un hombre llamado Benito Aguado, sufría una adicción alcohólica tan grande que, cuando se le terminó el dinero fue vendiendo todo cuento llevaba encima para poder seguir bebiendo. Cuando solo le quedaban los calzoncillos, no pudo beber más. No lo hizo por razones de pudor, sino porque nadie quiso comprarle esta prenda en mal estado.