Una niña muy pequeña, frágil, indefensa y temblando hasta el punto de castañear sus dientes, le decía a su muñeca, mientras la miraban húmedos de llanto sus grandes, inocentes y aterrados ojos: —Cuando los hombres malos dejen de matarnos con sus terribles bombas, mamá nos comprará, a las dos, un
Muchos años de extremas privaciones y enfermedades habían convertido el cuerpo del harapiento paria en un patético montón de huesos y pellejo mugriento. Una madrugada fría y desapacible, tendido sobre la grama de un céntrico parque de la superpoblada Mumbai, aquel desdichado agonizaba entre temblores y gemidos. Antes de que
Todos los seres humanos, al nacer traemos con nosotros algún don muy especial. Por eso existen los humanos explotadores, los humanos asesinos, los humanos esclavos, los humanos curanderos, los humanos capitalistas, los humanos estafadores, los humanos pintores, los humanos escultores, los humanos escritores, los humanos basureros, etc. Mi don especial
Ella pertenecía a ese grupo de mujeres cuyo voluptuoso vaivén de carnes prietas y bien curvadas excitan a los hombres hasta el punto de llegar a perder la cabeza por ellas. Al tipo duro, esta hembra de bandera, lo tenía muy encoñado. Llevaban tres semanas de ardiente y agotadora relación