MIENTRAS ME SEAS FIEL NO TIENES QUE PREOCUPARTE DE NADA (UNA GOTA DE HUMOR 641) MICRORRELATO
MIENTRAS ME SEAS FIEL NO TIENES QUE PREOCUPARTE DE NADA
—Que no, Encarna, que en la moqueta no me gusta. Vamos a la cama.
—En la cama no podemos. La ocupa mi marido.
—¿Está tu marido en casa? Pues yo me voy pitando.
—Quédate y no te preocupes. Le he escondido la pistola.
—Ni siquiera así, me quedo.
—No te reocupes le he suministrado un somnífero con el que estará durmiendo durante dos días.
—Me das miedo, Encarna.
—¿Miedo por qué?
—Miedo por lo lista y osada que eres.
—Mientras me seas fiel, no tienes que preocuparte de nada.
—Ya, ¿Pero y si se me pega lo tuyo?