LOS CUENTOS DEL ODIO (CURIOSIDADES)
La historia de nuestro planeta está plagada de buenos padres y de hijos malos. Los hijos malos suelen desagradecer y olvidar todo lo bueno que recibieron de sus padres y, si por casualidad esos padres tuvieron algún pequeño detalle que no gustó a esos hijos desagradecidos lo pregonan a los cuatro vientos, olvidan arteramente los inmensos bienes recibidos y vierten montañas de odio sobre cualquier pequeñez recibida, que no les ha gustado, de sus bondadosos y generosos padres.
Esto viene a cuento del odio que vierten algunos gobiernos actuales sobre ciertos gobernantes que tuvieron quinientos años atrás.
Estos gobernantes a los que me refiero, llevan más de doscientos años siendo dueños de sus países y vomitan odio acusando a sus padres de haberse llevado el oro que había en sus tierras.
En tiempos del Imperio Español, del año 1492 al año 1820, se extrajeron en América cerca de 200.000 kilos de oro. Para que se hagan una idea, de esta gran diferencia, solamente en el año 2015 Perú extrajo 173.000 kilos. Hagan cuentas. Solo en un país de América durante el año 2015 se extrajo una cantidad cercana a lo que se sacó en 328 años. De esos 200.000 kilos, los españoles solamente cerca del 20 por ciento se lo llevaron a la Península Ibérica. Con el oro que se quedó en América se levantaron más de 1.000 instituciones asistenciales (hospitales, enfermerías, casas de socorro, lazaretos,...) miles de kilómetros de carreteras, universidades, ayuntamientos, acueductos, catedrales, iglesias, puertos, imprentas, ...
¿Qué hacen ahora, quienes siembran odio, con esa inmensa riqueza en oro que consiguen todo el tiempo? ¿Qué les han construido o construyen esos extranjeros a los que venden el oro? Nada, ¿verdad? Pues tráguense su odio, y que les alimente a ustedes y a quienes les creen sin molestarse en indagar y averiguar lo que es verdad y lo que es mentira.