DESPEDIDA Y NUEVO COMIENZO (MICRORRELATO)
Ella ha dejado ya atrás los cuarenta años. En su rostro las dificultades por las que ha pasado en ciertos momentos de su vida, le han dejado algunas arrugas que las cremas caras que emplea no consiguen ocultar y, mucho menos, borrar. Afortunadamente para ella, sigue conservando todavía la esperanza de que alguno de sus más hermosos sueños se vean alguna vez realizados.
Ella continúa en el andén, agitando el brazo hasta que la distancia quita de su vista al hombre que se va en el tren. Entonces deja escapar un suspiro de alivio y decide que, a partir de este momento él se convertiría en un recuerdo que olvidara muy rápido. Ha sido un encuentro, una relación de dos semanas con el hombre que se ha marchado. Ha sido para ella una agradable aventura que nació sin futuro. Ha tenido suerte esta vez, no le ha salido dañado el corazón.
Camina hacia la salida de la estación, como caminan las mujeres cuando desean atraer la atención de los hombres. Sigue manteniendo viva la esperanza de encontrar finalmente al hombre que pueda hacerla feliz.
Antes de abrir la puerta de cristal para abandonar la estación se mira en vidrio a su imagen aparecida en él. Sonríe para ella. No ve las traidoras arrugas de su cara, sí ve el brillo de esperanza que da luminosidad a sus grandes y todavía bellos ojos.
(Copyright Andrés Fornells)