UNA GOTA DE HUMOR (454) MICRORRELATO


Arturito Mayonesa era un exquisito. Arturito Mayonesa había convertido a Encarna, su madre, en su incondicional esclava. Ella tenía que prepararle las delicias culinarias que él la exigía. La ropa tenía que lavársela y planchársela todos los días. Y como le pareciera que no estaba a su plena satisfacción, él
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Un muchacho cuyo rostro mostraba notable ingenuidad, entró en una comisaría de policía. Manifiestamente nervioso, retorciéndose las manos y con parpadeo acelerado, se detuvo delante del agente que se hallaba de servicio. —¿Qué puedo hacer por ti, chico? —le preguntó el funcionario, amable, educado, atento. El recién llegado, conteniendo a
No recuerdo en absoluto cuando me di cuenta de que nosotros éramos muy pobres. Posiblemente, ocurrió cuando descubrí que otras personas tenían cosas muy necesarias que nosotros no teníamos y su carencia nos significaba sufrimiento. No eran cosas caprichosas, extraordinarias o especiales, eran cosas para comer cuando tenías hambre. No