HOY ME APETECE HABLAR SOBRE UNA MODESTA HORTALIZA: EL PEPINO (ESBOZO DE INFORMACIÓN)

HOY ME APETECE HABLAR SOBRE UNA MODESTA HORTALIZA: EL PEPINO (ESBOZO DE INFORMACIÓN)

HOY ME APETECE HABLAR SOBRE UNA MODESTA HORTALIZA: EL PEPINO

Quizás no sabe nadie la fecha exacta en que llegó a España esta hortaliza originaria de las regiones tropicales del sur de Asia, pues se tiene conocimiento de que ya la cultivaban en la India hace más de 3.000 años.

Sí se sabe que de la India pasó a Grecia, de Grecia a Roma y los romanos nos los trajeron a nosotros para compensarnos de toda la riqueza que nos robaron —que fue lo contrario a poca— y nuestro famoso navegante —de incierto nacimiento—Cristóbal Colón llevó semillas a América, para que no se dijera que los conquistadores iban a ese maravilloso continente únicamente a realizar las mismas pillerías que los romanos cometieron en nuestro país.

Algunas características del pepino es que posee la facultad de emitir raíces adventicias por encima del cuello. Posee un tallo principal, anguloso y espinoso, de porte rastrero y trepador. De cada nudo parte una hoja y un zarcillo. En la axila de cada hoja se emite un brote lateral y una o varias flores, flores que pueden ser hermafroditas o unisexuales, aunque los primeros cultivares conocidos eran monoicos y solamente presentaban flores masculinas y femeninas y en la actualidad todas las variedades comerciales que se cultivan son plantas ginoicas, es decir, sólo poseen flores femeninas que se distinguen claramente de las masculinas porque son portadoras de un ovario ínfero. Fruto: pepónide áspero o liso, dependiendo de la variedad, que vira desde un color verde claro, pasando por un verde oscuro hasta alcanzar un color amarillento cuando está totalmente maduro y ofrece muy diferentes tamaños.

Espero que con lo descrito hasta aquí, el lector tenga ya acumulada una considerable cantidad de admiración para el prodigioso pepino, por lo menos tan inmensa como la mía.

Bien, ahora mencionaré unas pocas cosas para las que se usan los pepinos: hacer ensalada, zumo, mascarillas rejuvenecedoras y lo que menos se confiesa, abrir puertas al goce secreto con la ayuda o sin ella —de productos deslizantes— para primicias sexuales autodidactas y solitarias o en grupo.

Pero un mal día al pepino le surgió una enemiga primero y después muchos otros enemigos de ambos sexos, que olvidándose de los maravillosos servicios que este producto agrícola les había hecho, lo culparon de enfermedades mortales de todas las cuales era total y mártir inocente. Afortunadamente, eso quedó sepultado en el olvido. Espero que este panegírico mío no motive la subida de precio de este cilíndrico, refrescante y rico vegetal.

Read more