GOBIERNOS QUE EMPLEAN LA MENTIRA COMO HERRAMIENTA DE PODER
“Mentir constante no tiene como objetivo hacer que la gente crea una mentira, sino garantizar que ya nadie crea en nada. Un pueblo que ya no puede distinguir entre la verdad y la mentira no puede distinguir entre el bien y el mal.
Y un pueblo así, privado del poder de pensar y juzgar está, sin saberlo ni quererlo, completamente sometido al imperio de la mentira. Con gente así puedes hacer lo que quieras.
Esto nos lo dijo Annah Arendt, una prestigiosa historiadora y filósofa alemana que desarrollo el concepto “la banalidad del mal”.
En la actualidad un importante número de maléficos gobiernos están arruinando a sus pueblos económicamente, educativamente y espiritualmente, mientras ellos se enriquecen a costa de empobrecer a sus ciudadanos a los que convierten en súbditos, astutamente divididos y engañados empleando la falacia de que ellos son los buenos, y aquellos que disienten son los malos.
Hagamos todos oídos sordos a esos gobernantes sembradores de odio y maldad, que no nos quieren hermanos, sino violentísimos enemigos.