ESOS TIPOS QUE SE HAN CONVERTIDO EN LA PESADILLA DE NUESTRA VIDA (MIRORRELATO)
Creo que, en contra de las estadísticas que nos venden, cada día es menor la cantidad de gente que ve la televisión. Esto es así, tanto por los malísimos programas que frecuentemente nos ofrecen y que ofenden a la inteligencia de la mayoría de la gente que la posee, como por el inmenso protagonismo que se les da a los políticos.
En mi caso particular (y supongo que en el de muchísima gente más) en cuanto les veo aparecer en la pantalla (bien trajeados, maquillados y repeinados) se me ponen enfermos cuerpo y mente.
Y ciertamente es para enfermar cuando se escuchan la cantidad de mentiras de maldad y de odio que vierten contra quienes no piensan como ellos. Por eso, quienes seguimos influidos por las enseñnzas religiosas que recibimos en nuestra infandcia, les vemos con cuernos, rabo en punta de flecha y patas de cabra.
Todos los partidos están emporcados por la corrupción, unos más y otros menos, pero todos. Lo que ocurre es que los medios de comunicción, de difusion que les son afines, airean las corrupciones y errores de sus adversarios políticos y silenciasn e ignoran las todavía peores suyas.
Así que yo digo: Bienaventurados son aquéllos que todavía creen en un Dios bondadoso y omnipotente que, algún día hará justicia, y premiará a los buenos y castigará a los malos.
La esperanza es, para el náufrago en peligro de ahogarse, la única tabla de salvación que le queda.
Y creo que somos muchos los náufragos.