PERRO OFENDIDO (Microrrelato)

PERRO OFENDIDO

 

A la niña había un perro que la despertaba todas las madrugadas con sus altos y desagradables ladridos. Un día harta de escucharlo le colocó entre las patas una nota escrita por ella que ponía: ¡Cállate que no sabes ladrar! Aquel perro, ofendido, jamás volvió a emitir sonido alguno por su boca.