AMOR PARA TODA LA VIDA (MICRORRELATO)
(Copyright Andrés Fornells)
Graciela había nacido romántica, hacendosa y honesta. Por estas tres cualidades suyas mucha gente, aparte de su familia, la tenía un gran aprecio. Graciela contaba con dos amigas fieles y dueñas de la misma mentalidad que ella, Susana y Rita. Desde hacía una buena temporada, las tres salían juntas de paseo, iban al cine y asistían a las conferencias que daban eminentes eruditos, pues el tema cultural las apasionaba. Creían firmemente en que el saber no ocupa lugar y además enriquece la mente y el alma de quienes lo adquieren.
Anteriormente, a lo largo de un par de años habían frecuentado discotecas y masivos conciertos de música, pero dejaron de seguir con aquel tipo de diversiones, asqueadas de que los chicos que conocían en ellas aspiraban únicamente, como meta de rápido alcance, acostarse con ellas. De amor, matrimonio, formar un hogar, tener unos hijos, ninguno de los jóvenes que conocieron quería saber nada.
A menudo cuando se reunían las tres amigas solían introducir en su conversación lo muy frustradas que se sentían:
—Hemos nacido en la época equivocada. La gran mayoría de la juventud actual solo aspira al sexo sin compromiso y no cree en la fidelidad ni en el amor de larga duración.
—Y muy especialmente no lo creen los hombres.
—Bueno, bueno, que muchas mujeres también persiguen lo mismo que fines que ellos. La igualdad en trabajos y salarios no la consiguen, pero la igualdad sexual y el desenfreno si la consiguen.
El folleto de una empresa nipona que cayó en sus manos les cambió la vida a las tres amigas. El folleto en cuestión informaba de la existencia en ese país asiático de una academia en la que los hombres que terminaban un curso en la misma salían sobresalientes en las asignaturas de la galantería, el romanticismo y la fidelidad, cualidades que tan notorias habían sido durante los siglos XVIII y XIX. El único problema era que esos hombres que consideraban ideales para ellas, solo hablaban japonés.
Esta dificultad idiomática no las echó atrás. Muy decididas las tres amigas acudieron a una academia de idiomas, y con enorme esfuerzo y dificultad aprendieron la lengua que se habla en el País del Sol Naciente y ahora las tres amigas tienen un marido de los que aman toda la vida a una mujer, la respetan y le son absolutamente fieles.
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