UN EX FUTBOLISTA (MICRORRELATO)
—¡El balón! ¡El balón! ¡Tírenos al balón, abuelo! —gritaron los niños que jugaban al futbol en la calle, viéndolo rodar lejos de ellos.
El anciano encorvado que vio venir la pelota hacia donde él se encontraba, sonrió. La detuvo con su pie y recordando sus años mozos retrocedió dos pasos y chutó con todas sus fuerzas. El balón salió disparado, pasó muy alto por encima de las cabezas de los chiquillos y chocó con la luna de un escaparate rompiéndola.
Los pequeños tuvieron que enfrentarse al enfurecido tendero, pues el viejo exfutbolista, recobradas repentinamente sus piernas de juventud, había desaparecido corriendo y no estaba más visible cuando el grupo infantil señaló con sus brazos estirados hacia donde él había estado.