UN AZTECA ESPECIALMENTE PERVERSO
UN AZTECA ESPECIALMENTE PERVERSO
Unos pocos años atrás descubrieron la tumba del penúltimo emperador azteca y una leyenda que cuenta que el esplendor de este monarca era tal que para inaugurar el nuevo templo al dios Huitzilopochtli hizo sacrificar en sus altares de piedra recién tallada, a 20.000 hombres. La crueldad del ser humano viene de antiguo y, desgraciadamente, continúa presente. Pruebas de ello las tenemos a diario en varios países de este desdichado mundo nuestro.