PARA ROMEO, BESAR EN LA BOCA SÍ SIGNIFICABA UNA DEMOSTRACIÓN DE AMOR (MICRORRELATO)
—Romeo, que me beses en la boca no significa que me amas —mostrando Julieta el coqueteo de una duda.
Él que la conoce todo lo que una mujer permite al hombre que la conozca, dijo tontamente preocupado:
—Ah, ¿no? Julieta, por Dios, que yo te bese en la boca significa que te amo muchísimo. ¿Tú sabes la cantidad de bacterias que por esa vía recibo yo de ti, incluso con placer?
Julieta, herida en su amor propio, cortó la cuerda que sujetaba a Romeo en lo alto del balcón y él terminó en la enfermería de los Montesco con una pierna escayolada, en la que ella, arrepentida, escribió varias veces: Ti amo tantissimo, amore mio. Y Romeo, leyendo esto, sonreía embelesado.
Esta es la versión humorística de un drama tan desastrosamente triste, que hizo llorar hasta a las secas piedras del desierto. Y yo, sin ser piedra del desierto, y otros millones y millones de seres humanos tiernos vertimos toneladas de lágrimas.