OFENSORES Y OFENDIDOS (PÍLDORAS FILOSÓFICAS)

OFENSORES Y OFENDIDOS
Nadie es más fácil de ofender
que quién está predispuesto a ofenderse.
Y nada hay más injusto que condenar
sin darle una posibilidad a la inocencia.

OFENSORES Y OFENDIDOS
Nadie es más fácil de ofender
que quién está predispuesto a ofenderse.
Y nada hay más injusto que condenar
sin darle una posibilidad a la inocencia.
Era un niño soñador, fantasioso, distraído. Sus preocupados padres decían de él: —Este hijo nuestro no se concentra. Está siempre ausente, ensimismado, fuera de la realidad. —Es de temer que no hará nada en la vida. Que fracasará en todo aquello que emprenda, si es que termina emprendiendo algo. Dios
Un docente de lengua española se encontró en la calle con otro profesor al que conocía de haber trabajado ambos en la misma universidad. Llevaban bastante tiempo sin verse y les alegró mucho este encuentro. —¿Cómo te va, colega? —Bien. Sigo ganado la misma miseria de siempre. —También yo. Quizás
Marcelo Tinaja, físicamente, era todo lo contrario a hermoso, pero gozaba de buena salud y tenía, a sus cuarenta años, un puesto fijo de cobrador de peaje de autopista donde tragaba el humo que soltaban los tubos de escape de todos los vehículos que llegaban hasta su caseta, se detenían