DEPORTE FEMENINO EN TIEMPOS FRANQUISTAS (MICRORRELATO)
(Así se habría expresado, posiblemente, un falangista en tiempos de Franco)
Mujeres, el deporte es, sin la menor duda, fuente de belleza. El deporte procura a la mujer vigor, flexibilidad y salud. Algunas quizás argumentéis que los gimnasios son caros y que también lo son las raquetas y las bicicletas. Y ciertamente lo son. Estamos totalmente de acuerdo con vosotras. Son gastos innecesarios, absolutamente prescindibles, superfluos. Todas contáis con escobas, bayetas, plumeros, sacudidores, etc. Cuando regreséis de cumplir vuestro patriótico trabajo en la empresa donde estáis contratadas, emplearos a fondo en las tareas del hogar. Barred con alegría, emplear ambas manos es lo recomendable. Planchad empleando también ambas manos, lavad la ropa en vuestro pequeño lavadero empleando ambos puños. Sacudid las alfombras con la misma fuerza con que golpearías a los enemigos de nuestra España: una grande y libre. Haced todo esto y os garantizo que terminaréis teniendo ese cuerpo que envidias de las desvergonzadas actrices norteamericanas que se besan con extraños que no son sus maridos y lo hacen sin mostrar el menor pudor ni recato. Y os recomiendo cuando hagáis todo lo que acabamos de enumeraros con patriota alegría y llevando siempre vestimenta decente, como Dios y el Gobierno mandan. ¡Viva…!
El Dios que acababa de nombrar no le dejó terminar la frase permitiendo le diera un infarto que silenció para siempre al camarada ejemplar, que Dios lo tenga en su santa gloria.