Recuerdos Entrañables
—Esta noche voy a cazar un grillo ahí en los jardines de la placita, Andrés. —¿Y para qué quieres tú un grillo, abuelo? —Le haré una jaulita, lo colocaremos ahí en el balcón, y nos servirá de termómetro. —Pero qué dices, abuelo, ¿has perdido la chaveta? —manifesté dirigiéndole una mirada
Recuerdos Entrañables
MIRADAS PARA UN PIRATA He conocido, de niño, miradas que asaltándome consiguieron escribirme ingenuos madrigales en el alma. El pirata que hay en mí conserva todavía, de aquellos tiempos, esas miradas como botín de ilusionantes y mutuos abordajes entre naves que se enfrentaron poniendo en lid sus mejores armas seductoras
Microrrelatos
Mi abuelo Silvino fue un hombre que aprendió mucho de la vida y poco de los libros, pues la pobreza de su familia le obligó, cuando sólo contaba nueve años, en lugar de ir a la escuela ir a trabajar, y ya no paró. A mi abuelo Silvino, la existencia
Microrrelatos
Mi abuelo Silvino solía decirme con resignado pesar: Niño, cuando se llega a mi edad, la memoria nos falla más que una escopeta de feria. En realidad sólo te acuerdas, fijo, de dos cosas: de tú nombre y… ya se me ha olvidado la otra.