MORDEDORES (MICRORRELATO)
(Copyright Andrés Fornells)
Una vez un hombre fue a pasear. Era por la mañana y lucía el sol. El hombre estaba contento con la climatología y con él mismo. Tenía salud, tenía una novia llamada Pepita, un trabajo fijo y un excelente sentido del humor.
De repente surgió de la espesura una serpiente de enormes dimensiones y le dijo:
—Te aviso que mi intención es morderte.
El hombre que había salido a pasear no era ningún cobarde y respondió:
—Te aviso que, si me muerdes, yo te morderé también.
La serpiente no se esperaba esta reciprocidad y, como no le gustaba ser mordida, decidiendo seguir su camino se despidió del hombre lamentando:
—Qué asco, las personas habéis dejado de ser conformistas y resignadas.
—No es eso lo que ocurre conmigo. Es que no he desayunado todavía —le explicó el hombre, dando media vuelta para ir en busca de una cafetería.
El hombre en cuestión, que tan natural le había parecido todo lo anterior, era conocido como el Mago Merlín.