MALDICIENTES (MICRORRELATO)

 

sola 4

 MALDICIENTES

          Maldito seas. Maldito seas mil veces. Maldito seas millones de veces. Me abandonaste dejándome sin nada. Sin nada porque todo cuanto yo tenía te lo di. Te di mi amor, te di mi corazón, te di mi alma. Te di mis mejores años. Te entregué mi ilusión, mi alegría, mis días y sobre todo mis noches. Esas noches que me pasé adorándote, amándote con todas mis sentidos, con todas mis fuerzas.

         Maldito seas por haberme destruido, por haberme mentido un amor que nunca me tuviste, para poder con ese engaño disfrutar hasta la última gota la inmensa catarata que era el amor mío por ti y también mi dinero.

         En este momento estoy andando por la calle. Me rodean miles y miles de personas y cientos de máquinas. Las maquinas me ignoran. Las personas me ignoran igualmente. Vivo en una inmensa ciudad y estoy sola porque a nadie le importo una mierda. Con ellos me ocurre lo mismo que me ocurrió contigo, que yo, como ser humano, te importaba eso: una mierda.

         Al principio de haberme abandonado tú… Sí, al principio pensé matarme. Perderte a ti me significó perder las ganas de vivir. Pero me está manteniendo viva el rencor, que no el odio porque cuando se ha querido tantísimo como te he querido yo, el odio no consigue crecer lo suficiente. Esto reconozco que es algo sublime, y a la vez estúpido.  

          No me maté porque me salvó el orgullo. El orgullo de que no pudieses creer, tener la malvada satisfacción de que me habías destrozado hasta el punto de no importarme morir por ti, morir de amor por ti. Hasta este punto te creo perverso, ruin.

          Acabo de cruzar la calle sin mirar. Dos coches han frenado bruscamente para no atropellarme, y sus furibundos conductores me han maldecido. Y yo he respondido maldiciéndoles a ellos. Vivimos en un mundo en el que todos somos maldicientes.

         Que no daría yo por poder dormir por las noches, por poder dejar de amarte, por poder dejar de pensar en ti.

         Maldito seas. Maldito sea mil veces. Maldito seas millones de veces…

Read more