MIEDO AL ESPEJO (Microrrelato)

espejo 4

MIEDO AL ESPEJO

Llevaba un largo, largo periodo de tiempo sin mirarme al espejo. Me daba muchísimo miedo verme reflejado en él. Finalmente, ayer por la mañana encontré el valor suficiente para ofrecerle mi rostro a ese inmisericorde juez azogado, y me llevé una inesperada, agradable sorpresa: no me vi más viejo ni estropeado que la última vez que había pasado por esa misma angustiosa prueba; y reconocí que había hecho muy bien no cambiándole otra vez más, aunque lo precisaba, los cristales a mis envejecidas gafas de ver de cerca.