LEYENDA JAPONESA (MIS VIAJES)

LEYENDA JAPONESA (MIS VIAJES)

El templo de Jishu es un adoratorio sintoísta dedicado al dios del amor Okuninushi-Mikoto del que hay una estatua acompañada por la de su conejo mensajero. Aseguran que visitarlo ayuda a encontrar el amor verdadero.

En el centro del templo hay dos «piedras del amor» dos rocas que tiene al frente, las Mekura ishi;  estas rocas son consideradas milagrosas. Quien desea encontrar pronto pareja ha de caminar a ciegas, con los ojos cerrados, los dieciocho metros que separan una roca de la otra y si lo logra es señal de que verá en muy corto plazo cumplido su deseo.

Este santuario está un poco escondido en la parte de atrás de Kiyomizu y se llega a él a través de los estrechos y empinados pasos peatonales de Ninen-zaka y Sannen-zaka, que conservan todavía la atmósfera urbana del Japón antiguo.

Yo recorrí a ciegas, con los ojos cerrados, los dieciocho metros que separan una roca de la otra, con suma facilidad y, cuando regresé de ese viaje, a casa, me encontré con los amorosos brazos de mi mujer que llevaba esperándome, anhelante, las dos semana interminables que yo permanecí lejos de ella visitando Japón.