UN PALEONTÓLOGO GENIAL
UN PALEONTÓLOGO GENIAL
Un paleontólogo canadiense (cuyo nombre, de momento, guardaré secreto), que lleva un montón de años estudiando a los dinosaurios, asegura haber descubierto que inyectando el A.D.N de un gran saurio, a un embrión de pollo, podrá convertirlo en un pollosaurio de varios metros de longitud.
Con tan extraordinario hallazgo, este eminente sabio piensa acabar con el hambre del mundo, pues con un solo pollosaurio cualquier hambrienta familia numerosa tendrá carne para varias semanas.
Voy a proponer que este excepcional descubridor reciba los premios Nobel de Física, Química, Economía, Fisiología y Medicina, por su extraordinaria aportación a que se erradique de una vez el hambre en todo nuestro planeta. Espero no ser el único en reclamar tan altos y merecidos honores para este genial benefactor del género humano, y, finalmente, si no tienen a quienes darlos, me apunto voluntario a aceptar los premios de la Paz y la Literatura. Optimismo que no falte.
Ya me imagino las encuestas futuras:
-Señora, señor, ¿cuántos pollosaurios consume usted por año? El récord está en veinte por persona.
Yo, personalmente, le voy a proponer a este sabio paleontólogo que cree también minipollosaurios, para que las familias humildes puedan criarlos en los balcones de sus casas, pues siempre les saldrán más baratos que comprados en las tiendas.
