PARA QUITARSE EL MAL DE OJO (SUPERSTICIONES)
El mal de ojo es una superstición en la que todavía cree mucha gente. Según esta creencia, algunas personas poseen el poder de hacer daño a otras. Daño como enfermedades, reveses de la fortuna y hasta la muerte.
Mayoritariamente, estos poderes se consideran pueden ejercerlos brujas malas.
Un método que se utilizaba antiguamente para averiguar si las enfermedades que se padecían algunas personas y que los médicos no sabían cuáles eran y la continua mala suerte en todo, utilizaban lo siguiente. Cogían un mechón de cabellos de la persona que se suponía padecía el mal de ojo, se untaba ese pelo con aceite, se metía luego en cuenco con agua y si las gotas de aceite se veían aisladas existía la posibilidad de que le hubiesen echado mal de ojo.
Una forma de que ese mal no tuviese efecto dañino alguno consistía en llevar amuletos que lo eliminaban. Estos amuletos solían llevar cabezas de serpientes, colas de lagartijas y cabellos de gorgona.
Esto último era imposible de conseguir, pues la gorgona era un monstruo terrible y despiadado femenino que pertenecía a la mitología griega.
Según me contó una hechicera la forma que ella aconsejaba para curar el mal de ojo es la siguiente:
Por la noche, antes de acostarse colocar debajo de la cama unas tijeras grandes, las grandes que haya en la casa. Las tijeras se colocan abiertas y las puntas de ellas en la dirección de los pies de quien sufre el maleficio. Y me añadió que se obtiene la máxima eficacia añadiendo una cabeza de ajo y poniéndola en mitad de las tijeras abiertas.
Yo me limito a contar lo que me han contado, de su eficacia o ineficacia no respondo